Qué observar. Al menos 12 personas murieron y unas 3.000 resultaron heridas este martes en Líbano luego de que explotaran en forma simultánea unos 3.000 localizadores que usaban para comunicarse los miembros de la milicia chiíta de Hezbolá.
- Dicho grupo responsabilizó“plenamente” a Israel por los ataques y prometió un “justo castigo en formas que espera y que no espera”.
- Entre los heridos figura el embajador de Irán en Líbano, mientras que el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, resultó ileso.
- El portavoz del Departamento de Estado de EE UU, Matthew Miller, señaló que su país ignora quién ha causado las explosiones. “Estamos recopilando información sobre el incidente. Estados Unidos no ha estado involucrado ni ha sido advertido previamente”, agregó.
Cómo se realizó la inédita operación. Según reveló The New York Times, citando a funcionarios estadounidenses y de otros países informados sobre la operación, Israel ocultó material explosivo dentro de un nuevo lote de localizadores fabricados en Taiwán e importados a Líbano. De acuerdo con estas fuentes citadas por el medio estadounidense así fue, paso a paso, la operación:
Los localizadores o buscapersonas que Hezbolá solicitó a la empresa Gold Apollo en Taiwán, fueron manipulados antes de llegar a Líbano.
Material explosivo, de entre 28 y 56 gramos, fue implantado junto a la batería en cada localizador. Además, se incorporó un interruptor que podía activarse de forma remota para detonar los explosivos. Una fuente libanesa consultada por Reuters confirmó que los aparatos habían sido manipulados.
Los dispositivos encargados fueron más de 3.000, aunque fuentes libanesas hablan de 5.000. Hezbolá los distribuyó entre sus miembros en todo Líbano, y algunos llegaron a sus aliados en Irán y Siria.
La mayoría correspondían el modelo AP924 de la compañía, aunque en el envío también se incluyeron otros tres modelos Gold Apollo. Sin embargo, el fundador de la empresa taiwanesa Gold Apollo, Hsu Ching-Kuang, dijo que su empresa no tiene nada que ver con los ataques y que le concedió la licencia de su marca a una empresa húngara llamada BAC Consulting para utilizar el nombre Gold Apollo en sus propios buscapersonas.
A las 15:30 horas de este martes 17 de septiembre los buscapersonas en manos de miembros de Hezbolá en Líbano recibieron un mensaje que parecía provenir del liderazgo del grupo chiíta. Dicho mensaje activó los explosivos.
Los dispositivos estaban programados para emitir un pitido durante varios segundos antes de explotar. “Hemos visto este tipo de dispositivos, buscapersonas, atacados antes, pero no en un ataque tan sofisticado”, señaló la analista de ciberseguridad de la Universidad de Tel Aviv, Keren Elazari.
El ataque realizado atribuido a Israel afectó a los buscapersonas que estaban encendidos y recibiendo mensajes en ese momento.
Los ataques se realizaron contra la parte más vulnerable del aparato de Hezbolá, ya que este año el líder del grupo chiíta, Hassan Nasrallah, había limitado el uso de teléfonos móviles, por su vulnerabilidad a la inteligencia de Israel.
Expertos independientes en ciberseguridad que estudiaron imágenes de los ataques dijeron a The New York Times que estaba claro que la fuerza y la velocidad de las explosiones fueron causadas por material explosivo. “Estos buscapersonas probablemente fueron modificados de alguna manera para causar este tipo de explosiones; el tamaño y la fuerza de la explosión indican que no fue solo la batería”, señaló Mikko Hypponen,, especialista en inteligencia y asesor en materia de delitos cibernéticos de Europol.
Israel no se ha referido oficialmente al ataque hasta ahora.