Phil Rudd, el baterista de AC/DC acusado de amenazar de muerte y poseer drogas como metanfetaminas, vuelve a estar en el ojo del huracán. Esta vez, violó su libertad condicional y la orden del juzgado de evitar contacto con los testigos de la policía en el caso, según señala Rolling Stone.
Es así como se habría reunido con uno de sus ex guardias de seguridad, quien sería uno de los testigos clave en el caso contra Rudd, según señala el medio Consequence of sound. Esto habría provocado que el incidente consista en la violación de su libertad condicional.
Rudd estaba en una cafetería fuera de la Universidad Tauranga Girls, cuando "tuvo la oportunidad de encontrarse con alguien con quien no pensaba asociarse". Un testigo del hecho declaró que el hombre le dijo a Rudd "ya no trabajo para ti", lo que habría provocado la ira del baterista. Es así como lo habría empujado en el pecho, haciéndolo caer hacia atrás.
Rudd fue llevado al juzgado, donde su abogado solicitó la re-admisión de su libertad. El abogado Greg Hollister-Jones aceptó añadiéndole la condición de que no pueda consumir drogas ilegales ya que "el comportamiento de Rudd ha sido errático y esto ayudaría a que cumpliera con las condiciones que se le han puesto". El juez concedió la petición y Rudd volvió a estar en libertad condicional.
Rudd deberá volver al juzgado el próximo 10 de febrero para la audiencia de su caso. Los integrantes de AC/DC no han confirmado si el músico continuará en la banda.