Hace 14 años Paula Ugalde se convirtió en la madre de Laura, y en la maternidad fue que descubrió su vocación como emprendedora. “Mi hija tiene síndrome de down y en la escuela a la que la llevaba me invitaron a un taller de arteterapia”, comenta Paula.
Fue en estas clases que conoció a otras madres que estaban viviendo lo mismo que ella. “Este etapa fue muy linda, porque mi hija tenía solo dos años cuando yo partí en el arteterapia, y tenía muchas dudas y miedos. Pero con las mamás nos conteníamos, hablábamos y también fuimos encontrando un espacio para pasarlo bien”, recalca.
De esta manera, Paula comenzó a aprender más del arte del mosaico. “Al comienzo yo le vendía a mis amigas, a la familia y sin darme cuenta empecé a generar más clientes y así nació mi emprendimiento: Paula Mosaicos”, señala.
La clave del apoyo
Este emprendimiento ya tiene más de una década de vida, y algo que destaca su fundadora es el apoyo que recibió de parte de la Municipalidad de Puente Alto. “Con ellos pude obtener capital para invertir en mi pyme. También me impulsaron a participar en ferias de emprendedoras y a poder visitar otras comunas, lo que amplió mi red de clientes”, enfatiza esta emprendedora.
Gracias a toda la experiencia que ha adquirido como emprendedora pudo sobrellevar la pandemia y reenfocar su negocio. “En la pandemia abrí una nueva alternativa de venta con insumos y herramientas para que la gente pudiera dedicarse al mosaico en sus casas”, dice. De esta forma, Paula no solo vende artículos para clientes finales, sino que actualmente, uno de los puntos fuertes de su negocio es la venta de materiales.
Independencia económica
Uno de los aspectos que más valora Paula en su camino como emprendedora es haber adquirido la independencia económica. Y esto se debe a su visión de negocio y también, porque ha sido muy ordenada con su dinero.
“Todo lo que yo ganaba o la ayuda de la municipalidad que recibía la invertía en mi negocio. Y gracias a eso pude cumplir uno de mis mayores sueños que es tener mi propio taller para hacer clases personalizadas”, agrega.
Paula siempre imaginó con tener este espacio y se siente muy feliz de haberlo conseguido, por lo que sus proyecciones están en seguir avanzando con las clases personalizadas.
Los más pedidos
Paula cuenta con tres líneas de negocio: artículos, venta de insumos y clases personalizadas; y los productos más solicitados por sus clientes son:
- Números de casas elaborados en una base de fierro. Sus valores van desde los 45 mil pesos.
- Cajas para guardar el té, que están hechas en madera de raulí y cuentan con una tapa en mosaico. Su precio va desde los $8.000.
- Reloj de muralla confeccionado en raulí, con un valor de 80 mil pesos.
- Insumos: bases de raulí para distintos objetos y herramientas para la técnica del mosaico.
- Clases personalizadas de mosaico que duran tres horas por sesión y su precio es de 21 mil pesos. Incluye materiales para realizar un proyecto pequeño.
- Todo esto es a pedido y personalizado en diseño y color.
¿Dónde encontrarla?
Instagram: @paulamosaicos
Whatsapp: +56981710901
