Cerca de las 19:30 se empezó a sentir el “silencio sepulcral” en la derecha -así lo llamaron los dirigentes de Chile Vamos- en los grupos de chat de los partidos. A esa hora los resultados estaban más claros y se veía venir lo peor: en el primer conteo -el de constituyentes-, el pacto que conformó RN, la UDI, Evópoli y el Partido Republicano no alcanzaba ni siquiera el tercio de representación en la Convención Constitucional, un escenario que ni en los momentos más pesimistas de estos meses se avizoró.
“Chile Vamos tendrá que repensarse”, decían ya con números sobre la mesa. No solo no lograban el tercio de los constituyentes, sino que además perdían a esas alturas comunas emblemáticas para la centroderecha como Maipú, Viña del Mar, Valdivia, Estación Central, San Miguel, mientras en Santiago había una estrecha competencia en Santiago, donde Felipe Alessandri (RN), hasta el cierre de esta edición, estaba siendo derrotado por Irací Hassler (PC). Un escenario similar ocurría en Ñuñoa con la RD Emilia Ríos, quien vencía a Guido Benavides (Chile Vamos).
Sin embargo, hubo dos símbolos de la debacle de la noche: Catalina Parot (Evópoli), candidata por la gobernación metropolitana, ni siquiera logró pasar a segunda vuelta. Mientras, el exministro Gonzalo Blumel (Evópoli) no pudo salir electo para la convención, pese a que era uno de los más seguro, incluso en el sector lo daban por ganado “apenas se postuló”.
El chat de los dirigentes no era la única imagen sombría de la noche. RN y la UDI se demoraron un par de horas en salir a dar declaraciones. En primera instancia, se esperaba que se cerca de las 20:00 horas las directivas entregaran sus primeras impresiones de la jornada de megaelección.
Solo pasadas a las 22:00 horas, el presidente de la UDI, Javier Macaya, fue el primero en asumir la derrota ante la prensa. “Uno tiene mirar los resultados con humildad, recibir esta señal e ir a constituyente con la disposición de conversar, buscar acuerdos, buscar diálogos que es lo que nos está hoy pidiendo nuestro país”, dijo el diputado. Eso sí, Macaya recalcó que ningún conglomerado tradicional puede celebrar la noche de este domingo.
Minutos después, el precandidato presidencial de RN y el PRI, Mario Desbordes, catalogó de “grave” la baja participación en los comicios y dijo que esta derrota debe hacer “reflexionar” a Chile Vamos por no ser capaces de interpretar a la mayoría ciudadana, que estaba pidiendo cambios. “No hay duda de que una serie de errores cometidos como coalición y desde nuestro gobierno han tenido un impacto en la elección, pero también los partidos tenemos que reflexionar respecto de qué tipo de coalición tenemos que construir”.
Sobre las razones de la noche, Desbordes recordó que “discusiones estériles” como la del 10% está “trayendo costos”.
“Hay una desolación tremenda”, se decía, en tanto, entre los dirigentes oficialistas, al analizar a primera vista regiones como la metropolitana y Valparaíso.
Pese a ese negro panorama, en paralelo, el alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín (UDI), salía por la prensa celebrando el triunfo de Daniela Peñaloza en la comuna. “Dijeron que era una apuesta arriesgada”, recordó y destacó nuevamente que la nueva edil es joven, mujer y desconocida en el mundo político.
Ese buen resultado, junto con el de Vitacura de Camila Merino (Evópoli), días anteriores, había provocado en el sector duras diferencias entre la UDI y Evópoli. ¿La razón? En ambas comunas Chile Vamos enfrentaba una competencia paralela del Partido Republicano. Y, además, candidatas a la convención del gremialismo como Marcela Cubillos y Constanza Hube habían salido a apoyar al postulante por la alcaldía de Vitacura, Cristián Araya.
En Evópoli también había mejor ambiente que en la sede de sus pares de RN y la UDI: dijeron que tenían orgullo por los perdedores de la jornada, y que así son las reglas del juego. El precandidato presidencial, Ignacio Briones, recalcó estos comicios “son un llamado de atención a los partidos políticos, la reputación está por el suelo y eso se ha reflejado en esta elección de constituyentes”. A la sede del partido, de hecho, llegó Parot a entregar el apoyo recibido, pese a la derrota.
La noche de la derrota, en tanto, tomó su punto cúlmine con la autocrítica del Presidente Sebastián Piñera, quien dijo: “No estamos sintonizando con las demandas de la ciudadanía y estamos siendo interpelados por nuevos liderazgos”.
¿Nuevo escenario para las primarias presidenciales?
Hasta el domingo en la mañana, el único escenario pendiente en la derecha en el tema presidencial era el de la UDI, partido que la tarde de este lunes tendrá que tomar una definición al respecto en su consejo general.
La disputa entre Joaquín Lavín y Evelyn Matthei había tensionado al partido en los últimos días e incluso eso había traspasado al resto de Chile Vamos. La alcaldesa de Providencia ha insistido en que sean ambos los que compitan en la primaria oficialista mientras Lavín, en las últimas semanas, dio un giro en su postura y pidió expresamente a la directiva decidir por uno de ellos.
No obstante, ante la debacle en la derecha, surge en el sector la duda si se debe o no repensar esa primaria. Incluso, en día anteriores, en los partidos de Chile Vamos afirmaban que este lunes se debía medir “el estado de ánimo” de la derecha para tomar determinaciones.
Esa definición, en todo caso, está a contrarreloj, pues este miércoles vence el plazo para inscribir los pactos presidenciales para esas primarias ante el Servel.
De todos modos, recalcan en Chile Vamos, independiente de la decisión que se tome en torno a la primaria, el “repensar” la coalición debe ir justamente en el alto riesgo de perder de nuevo a fin de año en la presidencial y en las parlamentarias.
Todo esto, además, en el contexto de la persistente baja aprobación del gobierno de Piñera y la desafección del oficialismo con el Ejecutivo, que se agravó hace casi un año con la primera aprobación del retiro anticipado del 10% de los fondos de las AFP.
¿Cómo reponer el estado de ánimo en la centroderecha? Los próximos días serán clave para zanjar un camino.