Un plátano fue lanzado desde las gradas del Parque de los Príncipes al delantero brasileño Richarlison, que festejaba el segundo gol de la goleada 5-1 contra Túnez, este martes en París, en amistoso que fue interrumpido brevemente por la utilización de lásers que apuntaban a jugadores.
Richarlison acababa de marcar el segundo gol en el minuto 19 en este encuentro preparatorio del Mundial cuando sufrió el lanzamiento de varios objetos, entre ellos un plátano.
Contrariado, el delantero del Tottenham celebró con rabia el tanto con sus compañeros.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) reaccionó casi de inmediato ante el incidente a través de sus redes sociales.
"La CBF refuerza su posición de lucha contra el racismo y repudia cualquier manifestación prejuiciosa", señaló la CBF junto a una fotografía del equipo portando un mensaje anti racismo que había publicado uno de sus auspiciantes y que el equipo había mostrado en el campo.
En la imagen se visualiza al pentacampeón mundial con una pancarta que reza: "Sin nuestros jugadores negros no tendríamos estrellas en nuestra camiseta".
La casaca de Brasil tiene cinco estrellas, una por cada Copa del Mundo obtenida por la Canarinha.
El amistoso entre Brasil y Túnez se disputó con una gran mayoría de aficionados del equipo norteafricano en las gradas del Parque de los Príncipes.
En la primera parte el árbitro lo interrumpió brevemente debido al uso de lásers apuntando a los jugadores. El vocero del estadio pidió que no se continuaran utilizando estos dispositivos.
La semana pasada la selección brasileña defendió a otro de sus delanteros, Vinicius, objetivo de gritos racistas en el partido que el Real Madrid jugó en la cancha de su rival, el Atlético.
La justicia española ha abierto una investigación.