La directora ejecutiva de Santiago 2023, Gianna Cunazza, hizo oficial este viernes su renuncia voluntaria, la que se hará efectiva a partir del próximo martes 6 de junio. Todo esto en medio de duros cuestionamientos.
“Es un día lleno de emociones, pero, ante todo, siento tranquilidad y agradecimiento”, expuso Cunazza en una declaración, agregando sentir “tranquilidad de haber aportado y trabajado muy duro con el equipo de la Corporación para conseguir que, a casi 4 meses de los Juegos, estemos prácticamente listos para que Chile tenga una gran fiesta deportiva”.
Cunazza destacó los avances de su gestión en un año y dos meses. “Pasamos de 150 a casi 1.000 trabajadores y trabajadoras, conseguimos una ejecución presupuestaria del 100% el año 2022, se conformó un equipo profesional de primer nivel, elaboramos un plan estratégico y un plan de legado que permitirá que este evento deje una huella para nuestro país, alcanzamos adjudicar casi el 90% de licitaciones necesarias para ejecutar los Juegos, conseguimos tener un grupo de cerca de 30.000 voluntarios y voluntarias, y avanzamos significativamente en la democratización y descentralización del deporte, gracias a la definición de un plan de recintos que llegará a distintos sectores del país”, afirmó.
“Por supuesto que también hay objetivos por cumplir y quedan temas por resolver, solo puedo asegurar que siempre puse el interés de los Juegos por sobre cualquier interés personal, y que mi gestión estuvo regida todo el tiempo por principios de profesionalismo y probidad”, agregó.
Cunazza quedó en el centro de la polémica debido al bloqueo de recursos que el Instituto Nacional de Deportes (IND) aplicó a la corporación Santiago 2023 por no rendir en tiempo y forma casi 50 mil millones de pesos y que, a casi dos meses, todavía no se soluciona, aumentando la cifra en varios millones con el pasar de las semanas.
La ahora exdirectora ejecutiva de Santiago 2023 intentó justificar ese retraso basándose en problemas técnicos.