La jugadora de Colo-Colo, Michelle Olivares, acusó que al futbolista Jordhy Thompson "se le ha visto saliendo a fiestas y teniendo conductas agresivas" pese a que estaría en terapia.
El joven delantero albo había protagonizado casos de violencia de género contra su ex pareja y si bien fue puesto a disposición de la Justicia, se resolvió llegar a un acuerdo y suspender condicionalmente el juicio a cambio de una serie de medidas a cumplir, entre ellas, un tratamiento para el control de impulsos.
Tras ello, Jordhy Thompson fue reincorporado al plantel dirigido por Gustavo Quinteros e incluso disputó minutos en la caída ante Curicó Unido en el Estadio Monumental. Y no sólo eso, porque viajó junto a la delegación colocolina a Venezuela para enfrentar a Monagas por la Copa Libertadores.
En ese contexto, la jugadora del plantel femenino de Colo-Colo, Michelle Olivares Acevedo, realizó una profunda reflexión y crítica por la situación.
"Qué pena que la Justicia la maneje el dinero. Que el club ponga por encima un interés común avalando cualquier tipo de conducta antideportiva, dejando de lado los valores más importantes que con tanta destreza mostraba David Arellano. Qué vergüenza", partió señalando a través de Instagram.
"Siempre se pregunta el por qué las víctimas no salen de la relación tóxica al primer o segundo acto de violencia, el por qué no denuncian, el por qué no piden ayuda", agregó la futbolista.
En esa línea, dijo: "Bueno, la respuesta la tienen aquí, esto fue público, donde el agresor es jugador de nuestro club, jugador de Colo-Colo. Y ha quedado totalmente impune".
"Se habla de la reinserción social. Han pasado dos meses de supuesta terapia. En el proceso se le ha visto saliendo a fiestas y teniendo conductas agresivas. Aún así se le da el alta por arte de magia", acusó Michelle Olivares.