El tenista chileno Cristian Garín (43°) venció este lunes al australiano Álex de Miñaur (27°) y avanzó a los cuartos de final de Wimbledon.
Ahora, en sus primeros cuartos en la hierba londinense, el número 1 de Chile enfrentará al australiano Nick Kyrgios (40°), quien también durante esta jornada dejó en el camino al estadounidense Brandon Nakashima (56°).
El partido por un cupo entre los cuatro mejores del Grand Slam británico, que este año no entrega puntos ATP, se jugará este miércoles 6, en un horario por definir.
Un historial de controversias
Roger Federer lo describió como un "payaso", Rafael Nadal lo acusó en una ocasión de falta de respeto y, en una noche inolvidable, el sábado pasado en Wimbledon, Stefanos Tsitsipas lo tachó de "abusón" con "un lado demoníaco".
Pero guste o no, Nick Kyrgios podría convertirse en el campeón más polémico de la historia del Grand Slam inglés.
El australiano, de 27 años, llegó a los octavos de final tras un muy tenso enfrentamiento con el griego Tsitsipas en que el público de la pista número uno del All England Club londinense fue testigo de una gran bronca.
Los dos jugadores fueron amonestados por infracciones del código.
Kyrgios exigió que el griego fuera expulsado por golpear la pelota en dirección del público. En un momento dado, se negó a seguir jugando.
Tsitsipas admitió haber intentado deliberadamente golpear al australiano con la pelota para acabar con su "circo".
El griego cayó en la trampa de Kyrgios, perdió los nervios y, tras 3 horas y 17 minutos, quedó eliminado.
Un periódico lo describió como el hombre con el "brazo de oro". La leyenda estadounidense John McEnroe dijo: "Creo que hemos encontrado al próximo hombre del juego masculino".
Desde entonces, sin embargo, la historia de Kyrgios ha sido un cóctel de potencial no realizado, controversia en la cancha y multas.
Una vez fue sancionado por hacer un comentario lascivo sobre una novia del tenista suizo Stan Wawrinka.
Otra multa llegó tras ser acusado de falta de esfuerzo en Shanghái en 2016.
En el Abierto de Italia de 2019, lanzó una silla a la pista durante una bronca.
Hace tres años, fue multado con 25.000 dólares y se le impuso una suspensión de 16 semanas después de pronunciar improperios y romper la raqueta en Cincinnati.
Luego agravó los cargos acusando a la ATP de ser "corrupta".
En una entrevista concedida el mes pasado, estimó que las multas de su carrera han ascendido a unos 550.000 dólares.
Tras la primera ronda de Wimbledon el martes, fue sancionado con otros 10.000 dólares por calificar a un juez de línea de "chivato" y admitir haber escupido en dirección del público.
También protagonizó una polémica con Marcelo “Chino” Ríos, quien lo calificó de “payaso”. Si hasta el actor Ben Stiller se vio involucrado en una de sus pataletas.
Incluso, cuando Garín se coronó campeón del torneo de Indian Wells –de manera virtual– en 2020, Kyrgios dijo que “es lo más ridículo que he visto nunca”.