Este lunes Marcelo Ríos señaló que dejó de ser el entrenador del tenista chino Juncheng Shang. El ex número 1 del mundo asumió el desafío de dirigir al asiático a fines de julio, pero tras dos meses y una insostenible relación con el padre, se dio por finalizado el vínculo.
Según reportó La Tercera, el chileno fue notificado que no continuará siendo el coach del tenista chino. Esto, pese a que Jerry de 17 años escaló 167 puestos en el ranking ATP desde que comenzó su trabajo con el joven, además de levantar su primer título a nivel Challenger y conseguir otra final en el circuito.
Ríos señaló que se enteró de la noticia a través de su agente cuando iba viajando desde Atlanta a Sarasota. “Me bajé (del avión) y me pillé de sorpresa a Jerry (Juncheng Shang) y sus papás y les pregunté así que terminamos?. No se esperaban que yo supiera, pensaban decírmelo a través del agente. Y el papá me dice sí“, expuso Marcelo Ríos.
El chileno radicado en Estados Unidos aseguró que la determinación fue tomada por el padre de Shang. “Yo creo que esta fue una decisión del papá, no fue una decisión de Jerry. Aparte la mamá y el papá se agarran todo el día y le hace mal al pendejo. Le dije a Jerry que lo conocí súper poco y al papá que no podía ser que todo el día anduviera peleando. Se sale de sí, empieza a gritar o se va a la chucha. Es una cultura muy difícil, es muy complicado convivir con ellos“, comentó.
Además, el ex número 1 del mundo relató una pelea que tuvo con el padre del joven en un partido: “Tuve un encontrón con él porque en un partido le dije a Jerry termínalo acá, como diciéndole quiébrale aquí para no sacar por el partido. El papá entendió cualquier huéa y se enojó. Me dijo córtala, Marcelo y explotó. Me dijo que no le puedo decir eso, que tiene 17 años, que es muy chico“.
Otra discusión que tuvo con el padre de Shang fue luego de superar la primera ronda en el Challenger de Cary. Ríos comentó que no envió a descansar al tenista. “Jugó pésimo, después del partido le dije que fuéramos a entrenar altiro. ¿Qué?, me dice. Sí, a entrenar. Lo tuve entrenando una hora y ahí el papá se anduvo molestando porque cómo lo llevaba a entrenar después del partido. Entonces, yo no voy a transar mi manera de entrenar por hacer las cosas mal”, precisa.
Igualmente, Ríos reconoció que la determinación le causó asombro, considerando los resultados que obtuvo Shang con él. “No estoy dando excusa de nada, pero que me echen y me digan hicimos cuatro primeras rondas. Pero el tipo hizo dos finales y está 195. Por resultados no me pueden huevear, pero da igual. A mí no me influye. No lo estaba pasando bien con el viejo“, aseguró.
Finalmente, el ex tenista relató cómo fue su despedida con el joven de 17 años: “Le dije Jerry, te deseo lo mejor. Juegas muy bien, pero te falta mucho, mucho por aprender. Suerte en el futuro. Cualquier cosa que necesites, llámame nomás“, expuso.
