Este jueves, se conoció que la International Football Association Board (IFAB), planeaba introducir un nuevo tipo de sanción en el fútbol: la tarjeta azul.

Según recogía el medio británico The Telegraph, consiste en expulsiones de 10 minutos y su objetivo es limitar las protestas y reclamos que reciben los árbitros durante los partidos.

De esta manera, los jugadores que reciban una tarjeta azul serán expulsados durante 10 minutos y dejarán a su equipo con un jugador menos en ese periodo.

El citado medio afirmó que la tarjeta azul se ha probado durante esta temporada europea en las categorías inferiores del fútbol galés y sueco, pero también adelantó que podría probarse en la próxima edición de la FA Cup.

La FIFA sacó la voz respecto a la "tarjeta azul":

Producto del revuelo generado la posible incorporación de esta nueva sanción, la FIFA se refirió a esta noticia a través de sus redes sociales, descartando -de momento- su llegada a los niveles de élite del fútbol mundial.

"La FIFA desea aclarar que los informes sobre la llamada "tarjeta azul" en los niveles de élite del fútbol son incorrectos y prematuros", inició el organismo.

"Cualquier ensayo de este tipo, si se implementa, debería limitarse a realizar pruebas de manera responsable en los niveles inferiores, una postura que la FIFA pretende reiterar cuando se debata este punto del orden del día en la asamblea general del IFAB el 2 de marzo", cerró el ente rector del fútbol mundial.

 

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