Las jugadoras de las selecciones de Chile y Gran Bretaña se arrodillaron como gesto de apoyo a la lucha contra el racismo  antes del partido que ambos equipos disputaron este miércoles en Sapporo, el primero del torneo olímpico de fútbol femenino.

Las 22 futbolistas realizaron el gesto, autorizado por el Comité Olímpico Internacional (COI), que recientemente suavizó las normas que impedían lo que se considera protestas políticas.

Gracias a esta apertura de la rígida reglamentación del COI, los atletas están autorizados a expresar sus opiniones políticas en las redes sociales o en conferencias de prensa, pero siguen sin poder realizar actos de protesta en los podios, en las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos o en la Villa Olímpica.

La delegación neozelandesa anunció que sus jugadoras también se arrodillarán antes del encuentro contra Australia de este miércoles.

 

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