La imagen de Alexis Sánchez picando el balón ante Sergio Romero en la final de la Copa América 2015 sigue latente en la memoria de nuestro país.

Este jueves 4 de julio se cumplieron nueve años de ese momento y se conoció qué pasó con la pelota que pateó el tocopillano. 

Según detallaron en LUN, el balón estuvo durante varios años en manos manos de un abogado colombiano, coleccionista de objetos de fútbol y que era cercano al árbitro de esa final: Wilmar Roldán, quien dirigió polémicamente a la Roja ante Canadá en la Copa América 2024

De hecho, el amigo del réferi colombiano se contactó con la empresa chilena de subastas online que rescata patrimonio deportivo, The Dream Auctions, para entregarles el objeto que marcó un antes y un después en la historia del balompié nacional. 

Así volvió el balón de la Copa América 2015 a nuestro país

Alejandro Burgos, director de la empresa, conversó con el medio citado y reveló que el año pasado fue contactado por un abogado colombiano para contarle que tenía en su poder el objeto. 

"Nos dijo que tenía un objeto que para él no debía estar en Colombia sino en Chile: el balón que pateó Alexis Sánchez en la final de la Copa América 2015 y que le dio el título a la Roja", comentó. 

Además de la pelota, el sujeto en su poder tenía las tarjetas amarilla y roja que utilizó Wilmar Roldán en ese encuentro. "Nosotros le creímos la mitad y le pedimos más antecedentes. La pelota estaba con una dedicatoria del juez", sostuvo. 

"Le pedí fotos de todos los cascos del balón y fotos globales. Necesitaba investigar todo esto y le encontré tres o cuatro marcas de pasto. También revisé en detalle cada vez que enfocaron el pie de cada jugador que pateó y la pelota. Estuve una semana haciendo eso. Con eso confirmé que efectivamente era el balón", complementó. 

El abogado colombiano conservó el preciado objeto en un subterráneo a tres pisos bajo tierra. 

"La negociación duró cerca de un mes y vinieron personalmente a dejar la pelota de la final a Chile. Hacemos cada dos meses y medio subastas, hemos vendido camisetas en miles de dólares, varias de Diego Maradona, Pelé y la de Leonel Herrera de la final de la Copa Libertadores de 1991, pero este balón no será subastado. Estamos pensando bien qué hacer con él porque no queremos que quede en cualquier lugar", cerró. 

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