Chelsea rescató un empate 1-1 frente al Real Madrid el martes en el Estadio Alfredo Di Stéfano de la capital española, por el partido de ida de las semifinales de la Champions League 2020-2021, quedando con una mínima ventaja de cara a la revancha del próximo miércoles 5 de mayo en Londres.
El gol de los Blues fue obra del estadounidense Christian Pulisic, quien inauguró el marcador para la visita a los 14 minutos de juego en Madrid.
El atacante de 22 años acaparó la atención de la prensa deportiva al convertirse en el héroe del Chelsea frente al Real Madrid, pero lo que pocos saben es que, incluso antes de jugar en el Borussia Dortmund, pudo vestir la camiseta de Universidad Católica.
Así lo cuenta a La Tercera Jorge Alvial, el chileno que descubrió al delantero norteamericano cuando recién tenía 13 años.
“La historia es así. Cuando yo jugué en Washington Stars, vino un jugador a prueba. Era Mark, el papá de Pulisic. Se probó, era delantero y yo era el arquero. Justo chocamos en la prueba y con tanta mala suerte que se cortó los ligamentos. A los años después me llama. Sinceramente, yo no me acordaba mucho de él. Me dice ‘soy Mark Pulisic’’… Y me recordó el incidente. Yo le dije que me perdonara y me contestó: ‘Al contrario, eso me hizo muy bien, me hizo superarme mucho más’. Y continuó: ‘Te llamo porque tengo un hijo y yo, al menos, lo encuentro muy bueno’. Ya pues, le dije, yo lo voy a ver”, comenzó el relato.
Alvial viajó al sur del país para ver a la emergente figura del fútbol estadounidense. “En ese momento yo estaba trabajando para Chelsea. Entonces viajo a Florida. Christian estaba jugando un torneo de menores. Lo voy a ver y, sinceramente, me encantó. A los cinco minutos ya me había sorprendido… Un chico americano con esas mañas, con esa habilidad, con ese dribbling, con esa velocidad… Cuando lo descubro yo... A ver, me pareció ver a un Caszely cuando era chico. Tenía unas mañas sudamericanas impresionantes. Me llamó mucho la atención su inteligencia, su personalidad. Me encantó cuando lo vi, debe haber tenido 12 ó 13 años. Jugaba de enganche, un tipo de delantero mentiroso que venía desde atrás. Jugaba en un club de barrio en Pensilvania. En Estados Unidos, los equipos de menores viajan mucho a torneos por el país.”, continuó Alvial.
Pero el entusiasmo del veedor no llegó sólo hasta ahí y se comunicó inmediatamente con Londres.
“Fue impresionante. De ahí mismo, de la cancha, llamé a mi jefe en Chelsea que era Frank Anderson y le dije ‘estoy llevando un chico americano para prueba’. Me contestó: ‘¿Un chico americano, de adonde?’… Pero lo convencí y lo llevé. Estuvo casi tres semanas en Londres, yo lo acompañé, y su papá también estuvo ahí. Al final Chelsea decide no dejarlo por muchas cosas, yo creo que principalmente porque no tenía pasaporte europeo”, contó el chileno al periódico.
Pero ¿dónde entra la UC en toda esta historia? Según Alvial, luego de tampoco quedar en otros clubes de Europa, surgió la idea de traerlo a Sudamérica para que probara suerte en los cruzados o en River Plate de Argentina. Pero apareció el Borussia Dortmund.
“Después de lo de Chelsea se fue a Villarreal y tampoco quedó. Ahí yo no fui, porque estaba trabajando. Luego de eso se fue al PSV Eindhoven de Holanda, a otra prueba que, de alguna manera, también se la manejé yo. Justo ahí había una persona del Borussia Dortmund que estaba viendo a los chicos y le encantó este americano. El papá me llamó y yo le dije que era una excelente idea que se fuera para allá. Porque la próxima parada, si no quedaba en PSV, yo lo iba a traer a probarse a Universidad Católica y a River Plate de Argentina”, agregó el chileno.
“Si usted me pregunta si pudo llegar a la UC, claro que pudo estar. Yo ya había hablado con el papá y me dijo que probáramos todos los equipos en Europa que podamos. Yo lo ayudé de amigo, sinceramente, porque ya no había quedado en Chelsea. Ocupé las conexiones que tenía. Fue algo muy rápido, no recuerdo si alcancé a llamar a alguien de la Católica, pero ya habíamos decidido con el padre que si no quedaba en PSV nos veníamos a Sudamérica. Pero apareció el Dortmund, se fueron con el papá a Alemania y allá empezó a crecer como jugador. Yo siempre sigo en contacto con ellos. Después, cuando comenzó a destacar fue llamado a la Sub 15 de Estados Unidos y así hasta el resto de las categorías de esa selección”, agregó.
Tras cuatro temporadas en el Dortmund, Pulisic llegó al Chelsea por 77 millones de dólares, algo que al captador de talentos llena de orgullo.
“Para mí, Pulisic estará dentro de los diez mejores jugadores del mundo muy pronto. Eso me pone muy orgulloso, lo mismo que me ocurrió con Alphonso Davies de Bayern Munich y los hermanos Funes Mori (Rogelio en Monterrey y Ramiro en Villarreal) que también los descubrí yo. Cuando tú ves a un chico, lo afirmas y te das cuenta cómo ha progresado para mí es un honor verlo crecer. Te lo digo muy humildemente”, cerró Alvial.