La 'Pulga' sin red contra los 'Socceroos': Leo Messi y Argentina se juegan su destino frente a Australia (19h00 GMT) el sábado en octavos de final del Mundial-2022, justo después de un Países Bajos-Estados Unidos (15h00 GMT) que da el pistoletazo de salida a la fase de eliminatorias en Catar.
Entre la clasificación a la siguiente fase de la 'Albiceleste' contra Polonia (2-0), el miércoles por la noche, y su regreso a los terrenos de juego el sábado, en el estadio Ahmad bin Ali, pasan menos de 72 horas para las piernas de Messi y sus compañeros.
La competición no da el más mínimo respiro: este Mundial atípico, programado a finales de año tras un inicio de temporada frenético en los clubes, ha apretado su calendario hasta la final del 18 de diciembre, aun a riesgo de lesiones y fatiga.
"Es una locura volver a jugar tan pronto", criticó el DT argentino, Lionel Scaloni. "Merecíamos más descanso".
Víctima de este ritmo infernal, su centrocampista ofensivo Ángel di María, socio de Messi, es duda luego de sufrir una lesión contra los polacos.
Pero no es momento de lamentarse, puesto que Messi no tiene tiempo que perder: a sus 35 años, el genio argentino disputa "seguramente" su última Copa del Mundo, la última oportunidad de su provechosa carrera de levantar el último trofeo que le falta y que le igualaría a su compatriota Diego Maradona, coronado en 1986.
"Teóricos favoritos"
El primer objetivo es hacerlo mejor que en 2018, cuando Messi y compañía perdieron en octavos (4-3) a manos de la fogosa y joven Francia de Kylian Mbappé, campeona días más tarde.
Esta vez será Australia, rival mucho más modesto (38º en el ranking FIFA) y clasificado sorpresa por la llave D, quien se pone en el camino de la 'Albiceleste' y amenaza con mandar a casa a los campeones de la Copa América.
Scaloni no quiere alimentar un complejo de superioridad, especialmente después del debut en el Mundial, cuando Argentina cayó contra Arabia Saudita (2-1). Y este torneo ya ha vivido alguna que otra sorpresa, como las eliminaciones en fase de grupos de Alemania y Bélgica.
"No sé si el rival es inferior", dijo Scaloni. "Yo creo que hay que dejar de lado los teóricos favoritos y jugar al fútbol".
De hecho, Australia, que eliminó a Dinamarca (1-0), es un equipo solidario que sueña con alcanzar los primeros cuartos de final de su historia, después de igualar los octavos conseguidos en 2006.
"Un momento que esperan desde hace mucho"
¿A quién le pesará más el cansancio luego de los tres primeros partidos concentrados en siete días? La pregunta es para todas las selecciones presentes en octavos que no pudieron hacer rotaciones en el tercer duelo.
El mismo desafío tendrán los Países Bajos de Louis van Gaal, aunque con un día más de reposo, porque los neerlandeses y los estadounidenses jugaron el martes por la noche y vuelven a jugar este sábado por la tarde en el estadio Khalifa.
Sobre el papel, los 'Oranje' son favoritos, comandados por su joven delantero Cody Gakpo (3 goles) y la batuta del veterano Van Gaal.
Cuidado, sin embargo, con Estados Unidos, que no ha perdido en la fase de grupos y solo encajó un gol (de penal). Los futbolistas del 'Team USA' quieren los cuartos de final como en 2002, a cuatro años de acoger en su territorio el Mundial-2026, que organiza junto a Canadá y México.
Pero tras el aviso a su estrella Christian Pulisic, tocado en la pelvis frente a Irán (1-0), los estadounidenses están atentos a un descenso en su rendimiento.
"Solo tengo que asegurarme que los muchachos están física y mentalmente en forma", explicó su seleccionador, Graham Arnold. "Pero están listos. Veo en sus ojos que están listos. Es un momento que esperan desde hace mucho".