El entrenador de la selección uruguaya Marcelo Bielsa, agradeció el martes a los jugadores "por la alegría que nos dieron a todos", tras el histórico triunfo 2-0 ante Brasil en la cuarta fecha de las Elminatorias sudamericanas al Mundial 2026.
"Estoy con un sentimiento de agradecimiento muy grande hacia los jugadores, porque todos vimos cómo lucharon, cómo protegieron y buscaron el resultado", dijo el DT argentino en rueda de prensa al término del partido en el Estadio Centenario de la capital uruguaya.
Con el triunfo en la cuarta fecha de las Eliminatorias hacia el Mundial 2026 en Estados Unidos, México y Canadá, la Celeste de Bielsa rompió una racha de 22 años sin ganarle a Brasil, y mantuvo su récord de todos los partidos ganados en el Centenario en 2023.
"Lo positivo es cómo defendimos, lo que debemos corregir es cómo quitarle la pelota más rápido al rival", opinó el estratega de los uruguayos.
Con este resultado, Uruguay, segundo por mayor cantidad de goles a favor, se ubica después del campeón mundial Argentina (12 puntos), al igual que Brasil y Venezuela, todos con siete puntos.
Bielsa destacó esta victoria con Brasil como "el punto más alto" de los cuatro partidos jugados hasta ahora por las Eliminatorias. Lä semana pasada, Uruguay empató 2-2 con Colombia en Barranquilla, luego de ganarle 3-1 a Chile de local y perder 2-1 ante Ecuador en Quito en septiembre.
El entrenador de la Celeste, que no ha convocado a figuras históricas como Luis Suárez y Edinson Cavani, también reconoció que el momento de recambio de un equipo luego de un pasado exitoso "nunca es sencillo", pero subrayó que la nueva selección que se está configurando tiene el legado de sus antecesores.
"Si bien no es sencillo, hay muchos jugadores del equipo actual que han sido moldeados por aquellos que han dejado de estar. Escucho el respeto y la gratitud con que los jugadores hablan de los que han dejado de estar o de los ausentes circunstanciales", señaló Bielsa.
Según dijo, Ronald Araujo y Federico Valverde, pero también "todos" aún los más jóvenes, "son producto de una formación invisible, pero muy rica que hacen los jugadores sobre los propios jugadores, los mayores sobre los más chicos".