La noche de este miércoles, Arturo Vidal consiguió el paso a su primera final de Copa Libertadores, luego que el Flamengo derrotara por 3 a 1 a Vélez Sarsfield en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro, y cerrara la llave de semifinal con un contundente 7 a 1.
El “mengao” alcanzó su tercera final del torneo continental más importante en solo cuatro años, y buscará su tercer título, tras los obtenido en 1981 y en 2019.
Sin embargo, será la oportunidad para que Vidal conquiste por primera vez un título continental, el que le fue esquivo en su paso por Colo-Colo, y el que estuvo muy cerca de conseguir en Europa, pero que tampoco se le dio.
El “King” fue parte del equipo del cacique que llegó a la final de la Copa Sudamericana en 2006, la que perdió en Santiago ante Pachuca por 2 a 1. Luego de eso partió a Europa, donde brilló en la Juventus, el Bayern Munich y Barcelona, pero en ningún equipo pudo cumplir su sueño de levantar la Champions League.
En la temporada 2014-2015 fue cuando más cerca estuvo de ganarla cuando llegó a la final defendiendo a la Juventus contra el Barcelona. En esa ocasión cayó por 3 a 1 contra un equipo culé que tenía a Lionel Messi, Neymar Jr, y Luis Suárez.
Si bien Vidal ganó nueve títulos de liga en diez años, no logró ningún campeonato internacional por equipos, y lo podrá hacer el 29 de octubre cuando juegue con el Flamengo ante el Atlético Paranaense en Guayaquil, Ecuador.
Con esta final, Vidal se suma a los argentinos Carlos Tévez y Hugo Ibarra como los únicos tres jugadores en jugar las finales de la Copa Sudamericana, Copa Libertadores y Champions League.
El “Apache” es el único que pudo ganarlas todas. La Copa Libertadores la obtuvo con Boca Juniors en 2003 y la Sudamericana un año después con el mismo club. La Champions League la ganó con el Manchester United en 2008.
El “Negro” Ibarra en tanto, ganó la Copa Libertadores el 2001 y el 2003 con Boca Juniors y la Copa Sudamericana en 2005, pero no pudo conseguir la champions cuando jugó la final en 2004, defendiendo los colores del AS Mónaco, cuando cayeron ante el Porto de José Mourinho.