Grosseto venció por la cuenta mínima a Monterosi FC el domingo en casa, por la 24ª fecha de la Serie D italiana, pero más allá del resultado una curiosa situación acaparó las miradas.
Y es que el técnico del Grosseto, Lamberto Magrini, golpeó a uno de sus propios jugadores, Riccardo Cretella, luego de sustituirlo durante la segunda etapa.
El árbitro del compromiso no dejó pasar esta acción y expulsó al estratega.
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