AFP
La selección chilena se quedó fuera del Mundial Rusia 2018, en el golpe más duro para una "Generación Dorada" encabezada por Alexis Sánchez y Arturo Vidal, que parece caminar hacia el ocaso tras vivir una década de históricos triunfos.
La derrota 3-0 ante Brasil era previsible, pero el dolor de los chilenos se profundizó al ver cómo llegaba a su fin la etapa más gloriosa de la selección.
"Lamentablemente se ha cerrado un ciclo", dijo un abatido Juan Antonio Pizzi tras la triste derrota ante Brasil, el corolario de una pésima presentación en la recta final de las Clasificatorias, en la que perdió tres partidos (ante Paraguay 3-0, Bolivia 1-0 y Brasil 3-0) y ganó uno solo (ante Ecuador 2-1).
Pero la debacle se había iniciado mucho antes.
Tras perder la final de la Copa Confederaciones ante Alemania en julio pasado, "La Roja" se olvidó del juego rápido y del dominio del rival que lo caracterizaba, sumado al desgaste físico que sus principales figuras mostraban en cada partido, afectados por la seguidilla de juegos en sus clubes, mayormente en Europa.
Además del bajón futbolístico y físico, se sumaron escándalos de indisciplina. El último de ellos involucró a Vidal – ausente en el duelo ante Brasil – en una ruidosa fiesta en un casino cercano a Santiago, horas antes del partido que Chile perdió con Paraguay 3-0.
Tras la finalización del juego ante Brasil, la esposa del arquero Claudio Bravo lanzó un misil desde su cuenta de Instagram: "Yo sé que la mayoría se pelaron el culo, mientras otros se iban de fiestas e incluso no entrenaban de la borrachera que llevaban", afirmó Carla Pardo, volviendo a instalar el fantasma de la indisciplina que ha perseguido a "La Roja".
¿Abandonan el barco?
La eliminación dio paso a una serie de interrogantes sobre la continuidad de algunos jugadores en la selección y si ya es el momento del recambio en "La Roja".
"Creo que depende del técnico que venga y la idea que tenga. Me siento capacitado para continuar", dijo Claudio Bravo, el portero y capitán de Chile a la prensa en el aeropuerto de Santiago.
Por su parte, Arturo Vidal, después de la derrota ante Bolivia, manifestó que se retiraría de la selección chilena si ésta no clasificaba, o que lo haría después de la eventual participación de "La Roja" en el Mundial si aseguraba los boletos a Rusia.
Pero tras la eliminación, Vidal dio un paso atrás y afirmó que "cada vez que me llamen estaré a disposición de mi selección".
Gary Medel, otro de los estandartes del equipo, afirmó que seguiría en el plantel, mientras que Alexis Sánchez ha guardado silencio desde la triste derrota.
Una década dorada
Desde 2007, cuando un grupo de jóvenes jugadores logró el tercer puesto en el Mundial Sub 20, los analistas deportivos preveían el nacimiento de algo diferente, a la cabeza de un casi adolescente flaco, moreno y alto defensor, y un tímido niño, delantero lleno de talento.
Eran Arturo Vidal y Alexis Sánchez.
Ya como profesionales, el mítico técnico argentino Marcelo Bielsa dirigió a estos jóvenes, a quienes enseñó su filosofía de fútbol de velocidad y presión sobre el rival.
Tras aprender la lección de Bielsa, el dúo estrella llevó a Chile a clasificar al Mundial Sudáfrica 2010, luego de 12 años de ausencias de la principal fiesta del balompié, su primer hito histórico.
Luego de la salida de Bielsa en 2011, hubo una etapa de oscurantismo con la llegada de Claudio Borghi a la banca chilena, quien fue despedido tras una mala actuación en la Copa América de Argentina 2011 y en la clasificatoria para el Mundial Brasil 2014.
Su compatriota, Jorge Sampaoli, un devoto seguidor de Bielsa, se hizo cargo del grupo, al que le devolvió el juego de rapidez y presión clasificando al Mundial de Brasil y cayendo honrosamente en octavos de final con la "Verdeamarela".
Un año después llegó el mayor logro de este equipo. Chile organizaba la Copa América que nunca había ganado, pero esta generación dorada dio el golpe a la historia y en una final de infarto – que llegó a los penales tras un 0-0 – Alexis Sánchez convertiría el gol más importante para "La Roja", que significaba el primer título de la selección absoluta.
En 2016, en medio de la clasificatoria para el Mundial de Rusia, Sampaoli dejó "La Roja" y lo reemplazó Juan Antonio Pizzi, el cuarto entrenador argentino que se hacía cargo del plantel de manera consecutiva y con quien ganó la Copa América Centenario, el segundo título para Chile.
"Me quedo con lo mejor de los 10 años, lo ganado está", dijo Medel.