Rusia venció 5-0 a Arabia Saudita este jueves en el Estadio Luzhnikí de Moscú, en el partido inaugural del Mundial 2018, válido por el Grupo A.
El equipo anfitrión, que no ganaba en una Copa del Mundo desde Corea y Japón 2002, cuando venció a Túnez 2-0, aprovechó su condición de local para imponerse en casa y dar el primer golpe ante el que probablemente sea el rival más débil de la serie, que también integran Egipto y Uruguay.
En apenas 12 minutos de juego el centrocampista Yury Gazinskiy abrió la cuenta para desatar la locura entre los fanáticos locales presentes en el Luzhnikí.
Poca resistencia mostraban los dirigidos por Juan Antonio Pizzi, lo que permitió que antes del descanso, a los 43’, el delantero del Villarreal Denis Cheryshev dejara el marcador 2-0. Una tranquilizadora ventaja de cara a la segunda etapa.
En el complemento parecía que Rusia quitaba el pie del acelerador, pero en los últimos 20 minutos sencillamente pasó la aplanadora sobre los “Reyes del Desierto”, que sólo registraron una llegada al arco contrario.
A los 71’ Artem Dzyuba aumentó y dejó las cosas 3-0, una victoria que ya dejaba felices a los dueños de casa. Sin embargo, en los descuentos, Cheryshev repitió a los 90+1’ y Aleksandr Golovin selló la goleada a los 90+4’.
Destacar que este resultado es la segunda diferencia más abultada en un partido inaugural, luego del triunfo de Italia por 7-1 sobre Estados Unidos en 1934.
De esta forma Rusia se queda con sus primeros tres puntos y es momentáneamente el líder del Grupo A, a la espera del duelo entre Egipto y Uruguay, este viernes a las 08:00 horas de nuestro país.
