Fue la flameante incorporación de Los Ángeles Galaxy y hoy debutó con el pie derecho ante Los Ángeles FC. Zlatan Ibrahimovic ingresó a los 71’, cuando su equipo caía por 3-2 ante su clásico rival.
Solo le bastaron seis minutos en cancha para marcar un golazo de fuera del área y conseguir el empate transitorio.
La euforia del sueco de 37 años fue tal, que se sacó la camiseta y le mostraron amarilla.
Sin embargo, el festejo desmedido se desató cuando en el 90’+1 anotó el 4-3 definitivo a través de un cabezazo.
Locura total en Los Ángeles, donde el delantero hizo celebrar a sus compañeros y a los aficionados que llegaron a presenciar el encuentro.
Por lo pronto, Zlatan y su escuadra celebran con un ojo puesto en el Sporting Kansas City, equipo al que enfrentarán el próximo domingo.