Una amarga jornada fue la que vivió el Milan tras caer por 3-2 frente al Inter en el Derby della Madonnina, uno de los grandes clásicos del balompié europeo.
Corría el minuto 69 de encuentro cuando el técnico del Milan, Genaro Gattuso, decidió sustituir al volante Franck Kessié por Andrea Conti, lo que genero la molestia del primero.
Ofuscado, el africano se dirigió al banquillo, lugar en el que el argentino Lucas Biglia le exigió que sea más educado, lo que generó una hostil respuesta en Kessié.
Lejos de calmar los ánimos, Biglia le repitió la frase, siendo reprendido por su compañero, Diego Laxalt.
Posterior a la disputa, ambos jugadores se juntaron para aclarar la situación y fue el mismo Kessié quien se declaró culpable de la discusión, considerando innecesaria toda la escena generada.