El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) redujo este viernes la suspensión del dirigente nacional Harold Mayne-Nicholls, antiguo responsable de la Comisión de Evaluación de los Mundiales de 2018 y 2022, de tres a dos años.
Encargado de la evaluación de las candidaturas a la organización de las citas planetarias, atribuidos respectivamente a Rusia y Catar, el personero acudió a la instancia con sede en Lausana para recurrir la decisión de la Comisión de Ética de la FIFA.
Según esta última, el expresidente de la Federación chilena había "pedido en varias ocasiones y por iniciativa propia varios favores personales", durante el proceso de atribución de ambos Mundiales.
Además, la investigación indicó Mayne-Nicholls pidió prebendas a Catar para su familia.
Suspendido en julio de 2015 de toda actividad ligada al fútbol, la sanción fue reducida en abril de 2016 de siete a tres años.