AFP
Cuatro de los mayores auspiciadores de la FIFA; Coca-Cola, McDonald’s, Visa y Budweiser (este último presente en el Mundial de Brasil 2014), exigieron este viernes la renuncia inmediata del presidente del organismo, Joseph Blatter, para restaurar la confianza en esa institución arrasada por un escándalo de corrupción.
Ante esta demanda dada a conocer por las cuatro empresas estadounidenses con pocos minutos de diferencia, Blatter aseguró que "no renunciará", a través de un comunicado de su abogado neoyorquino.
La gota que rebalsó el vaso fue la apertura de un proceso penal la semana pasada por la justicia suiza contra el presidente dimisionario, sospechoso de un "pago desleal" de dos millones de francos suizos (1,8 millones de euros) en 2011 a Michel Platini, titular de la UEFA y favorito para sucederle.
Para las compañías, Blatter debe alejarse del cargo para que la FIFA "pueda comenzar un proceso de reforma creíble y sostenible" ante el escándalo de corrupción que la azota desde hace meses.
"Por el bien del juego, Coca-Cola Company llama al presidente de la FIFA, Joseph Blatter, a renunciar de inmediato", afirmó la gigantesca empresa de bebidas con sede en Atlanta, al sur de Estados Unidos.
"Cada día que pasa, la imagen y la reputación de la FIFA continúa manchándose. FIFA necesita una reforma urgente y completa, y eso solo puede ser llevado a cabo a través de un enfoque verdaderamente independiente", agregó.
De su lado, McDonald's señaló que los "acontecimientos de las recientes semanas han continuado perjudicando la reputación de la FIFA y la confianza pública en su liderazgo", exigiendo la dimisión "inmediata" de Blatter.
Las mismas palabras del lado de Visa: "Dados los acontecimientos de la semana pasada, es claro que sería en el mejor interés de la FIFA y el deporte que Sepp Blatter renuncie de inmediato", indicó la compañía de tarjetas de créditos.
Blatter resiste
Pero el abogado neoyorquino de Blatter, Richard Cullen, reaccionó rápidamente tras el reclamo de las empresas para asegurar que su cliente no dará un paso al costado.
"Si bien Coca-Cola es un auspiciante valorado de la FIFA, Blatter discrepa de manera respetuosa con su posición y cree firmemente que renunciar a su cargo ahora no sería en el mejor interés de FIFA ni haría avanzar el proceso de reforma. Por lo tanto, no renunciará", dijo Cullen, en un comunicado.
Blatter, de 79 años, había anunciado que abandonará la presidencia de la FIFA el 26 de febrero de 2016, cuando se elija a su sucesor.
Desde el 27 de mayo, cuando tuvieron lugar las detenciones de siete dirigentes del fútbol mundial en un hotel de Zúrich a pedido de la justicia estadounidense y la imputación de otras siete personas entre dirigentes y empresarios, la FIFA vive de sobresalto en sobresalto por los escándalos de corrupción.
El impacto y la amplitud de las denuncias motivaron que el propio Blatter anunciara su marcha apenas cuatro días después de haber sido reelegido en la votación del 29 de mayo.
Sin embargo, su movida para permanecer hasta febrero fue sacudida por el procesamiento penal, que ha dejado además mal parado a Platini, presidente de la Confederación europea y cuya candidatura a sucederlo tambalea.