Dos historias dan que hablar en medio de la tragedia que enluta al cuadro de Chapecoense, tras sufrir un accidente aéreo.
Se trata los casos del hijo del fallecido DT Caio Junior y uno de los jugadores, quienes no se embarcaron en el vuelo que colisionó en la localidad de Rionegro.
El primero es Matheus Saroli, hijo de Caio Junior, quien reveló en su perfil de Facebook que no pudo viajar a territorio colombiano porque se le quedó su pasaporte.
Por su parte, el portero suplente del Chapecoense, Marcelo Boeck, no se unió al plantel, ya que pidió un permiso especial para no viajar para la disputa del primer duelo de la final de Copa Sudamericana.
El golero pidió voluntariamente a la dirección del club para quedarse en casa y no viajar a Colombia para quedarse y celebrar su cumpleaños.
“El club le dio permiso y no viajó, ha sido un alivio muy grande en un momento de profunda tristeza por la tragedia que ha sucedido y ha golpeado a todo el mundo del fútbol”, aseveró el agente del jugador.