Chile no lo pasó bien en Porto Alegre. La capital del Río Grande del Sur recibió a la Selección Chilena y a la Marea Roja para disputar el duelo válido por las semifinales de la Copa América Brasil 2019 frente a Perú.
El frío, lluvia y viento se hicieron sentir en todo momento. Pese a esto, Luis Cuevas (31) y su hijo Martín (8) llegaron a la puerta del hotel de concentración de Chile con la ilusión de compartir con los jugadores. El niño, siempre sonriente, no se despegaba nunca de un balón y disfrutaba de un improvisado "Metegol" junto a un grupo de niños en los accesos al Novo Hotel.
Su padre, lo miraba en reiteradas ocasiones, lo apoyaba y le ajustaba un gorro de hilo de Colo Colo que llevaba para poder protegerlo de los 12°C que se registraban. "Somos fanáticos del Colo. Siempre viajamos con mi señora también, pero lamentablemente no pudo venir. El 22 de mayo fuimos padres nuevamente y ella se quedó en Santiago junto con Matías Esteban", dijo Luis quien reconoció los nombres de su segundo hijo se deben a la idolatría por Matías Fernández y Esteban Paredes.
Oriundo de Quinta Normal, región Metropolitana, Luis y Martín comenzaron la ruta a fines de junio. Estuvieron ante Colombia y también ante Perú. "Mi sueño es ver a Chile en el estadio Maracaná", dice Martín con el balón en sus manos y agrega: "Uno de mis ídolos es el 'Condor' Rojas". Veo videos de él por YouTube".
La espina bífida es una anomalía congénita del tubo neural en que se produce un defecto de éste que lleva a un cierre incompleto de la columna ósea, de los planos musculares y de la piel, quedando la médula espinal y las meninges expuestas al líquido amniótico de la cavidad uterina.
El niño tiene espína bífida, situación que lo tiene en silla de ruedas. Esto no ha sido impedimento para que disfrute del fútbol. El menor asiste a terapias en Teletón y en la corporación Espina Bífida doonde ha recibido asistencia. Actualmente juega en una escuela de fútbol de Palestino.
"Me gusta como juega Gabriel Arias", dice sonriendo y agrega: "Brayan Cortés me regaló una camiseta". El niño habitualmente visita los lugares de concentración. En 2016, Claudio Bravo le regaló sus guantes autografíados.
Este 2019 su nuevo sueño era compartir con Alexis Sánchez y Arturo Vidal. Para esto le hizo guardia a la Roja en todo momento a la espera de sus ídolos.
Durante la tarde asistió al Arena do Gremio. El niño junto a su padre quedaron apenados por la derrota pero agradecidos por todas las alegrías que entregó la "Generación Dorada".
"Doy las gracias a estos jugadores porque me hicieron feliz. Eso sí, no podré ir al Maracaná", dijo Martín triste. La estadía de ambos se prolongaba hasta Río de Janeiro, pero sólo si Chile avanzaba a la final, ya que en caso contrario se devolverían a Santiago.
Un día después de la derrota ante Perú, y con la Roja aún en Porto Alegre, volvieron al Hotel. Martín estaba esperanzado en que Alexis y el "King" compartieran un minuto con él. Su padre hacía la gestión para poder entregarle aquel privilegio al menor y tras una larga espera los jugadores de la Roja salieron al paso.
Martín no tenía palabras para describir el momento. Pese a la derrota, y no poder asistir al Maracaná, cumplió el sueño de compartir con Arturo Vidal y Alexis Sánchez. Se tomó fotos y conversó con ellos. Además, se llevó de regalo sus camisetas.
Luis, tras haber cumplido el sueño de su hijo gestionó adelantar el regreso a Santiago. Ya con más de una semana en Brasil extraña a su mujer y a Matías Esteban.
Este sábado regresan a Chile y se van con un recuerdo único: el haber acompañado al que quizás será una de las últimas presentaciones de la totalidad de la generación dorada vistiendo los colores de Chile.