Hace 60 años, en junio de 1958, se celebró el Mundial de Fútbol en Suecia. Nikita Simonyan era entonces el capitán del equipo de la Unión Soviética.

Simonyan tiene muchos recuerdos de ese torneo, pero quizás el más importante, dice, fue haber chocado contra el superestrella brasileño Pelé cuando este debutaba en su primer Mundial.

Cuando comenzó el Mundial de Suecia los soviéticos pensaban que tenían una buena oportunidad de ganar el torneo, a pesar de que habían quedado en lo que los expertos consideraban el grupo más difícil de la competencia, el grupo 4, que incluía a Brasil, Inglaterra y Austria.

"Nos hospedaron al lado de los brasileños y nos salíamos a hurtadillas para espiarlos en su entrenamiento", le cuenta Simonyan a la BBC.

"Ellos traían esa nueva e increíble formación, la 4-2-4, y nosotros nos maravillábamos por lo bien que jugaban. Y por supuesto traían a un nuevo jugador, un chico delgado de 17 años llamado Pelé".

Momento importante

El Mundial de Suecia marcó un momento importante en la historia del fútbol brasileño.

No sólo era el debut mundialista de Pelé, también fue la primera aparición en un Mundial de uno de sus más grandes jugadores: Garrincha, y una competencia en la que Didi fue capaz de mostrar la inquebrantable clase de su juego en un escenario mundial.

Tal como recordó el diario Botafogo Star, el equipo brasileño de 1958 "mezclaba la energía y la audacia de los jugadores jóvenes, con la serenidad y el conocimiento de la experiencia; desde un Pelé de 17 años dando sus primeros pasos hacia la grandeza, hasta un experimentado lateral Nílton Santos de 31 años reafirmando su propio sitio en el salón de la fama".

Pero Brasil enfrentaba también a otros grandes del fútbol en el "grupo de la muerte", incluidas los estrellas soviéticas Igor Netto, el propio Nikita Simonyan y uno de los mejores porteros de todos los tiempos: Lev Yashin.

Así, después de que Brasil eliminó a Austria 3-0 y empató con Inglaterra 0-0, le tocó el turno de enfrentar a los temidos soviéticos.

"Pelé, el gran Pelé, jugó su primer partido contra nosotros", le cuenta a la BBC. "Ni siquiera había cumplido los 18 años".

"Nos encontramos recientemente y me dijo que yo lo había lesionado en ese mundial".

"Le dije: '¡pero jugamos en la misma posición!', y Pelé me dijo: '¡No, tú entraste al área de penalti y me lesionaste!'".

"Entonces yo le contesté: 'Ah, bueno, eso ya pasó la historia, ¡yo lesioné al gran Pelé!'", recuerda Simonyan.

La lesión de Pelé no fue grave y los brasileños derrotaron a los soviéticos 2-0. A pesar de ello, el equipo de Simonyan logró pasar a las semifinales.

Los soviéticos habían derrotado a Austria 2-0 y empatado 2-2 con Inglaterra, donde Simonyan anotó el primer gol del partido.

Inglaterra quedó fuera cuando los soviéticos ganaron 1-0 en el desempate para decidir quién pasaba a la segunda fase.

"Pasamos a los cuartos de final", cuenta Simonyan, "lo que significó que éramos uno de los ocho mejores equipos del mundo".

Después las cosas se le complicaron a los soviéticos cuando fueron derrotados por los anfitriones y quedaron fuera del torneo.

Brasil, mientras tanto, siguió avanzando y se convirtió en campeón del mundo cuando derrotó a Suecia 5-2, con el joven Pelé anotando dos goles en ese partido.

Amigos

Nikita Simonyan, que ahora tiene 91 años, y el célebre Pelé, de 77, todavía siguen siendo amigos hoy en día.

Cuando el "Rey del fútbol" hizo una visita de negocios a Moscú en 1997, se reunió con Nikita Simonyan.

"Fue una reunión placentera e inolvidable, que siempre recordaré con calidez", le contó Simonyan a Mediamax Sport.

"Pelé me dijo: 'Nikita, perdónanos por favor'. Yo quedé sorprendido y le pregunté porqué tenía que perdonarlos".

"Pelé sonrió y me dijo: 'por haberlos derrotado entonces'", recuerda el jugador exsoviético, refiriéndose al encuentro de 1958 en el que Brasil había derrotado a los soviéticos 2-0.

"Tengo que admitir que trabajamos muy duro en ese partido, pero los brasileños eran mucho más fuertes que cualquier otro equipo. Eran invencibles", declaró Simonyan.

El futbolista soviético también recuerda haber conocido en Suecia a Bobby Charlton, considerado el mejor jugador inglés de todos los tiempos y uno de los mejores futbolistas europeos del siglo XX, con quien siguió encontrándose después durante años.

Simonyan guarda incluso una fotografía en blanco y negro que les tomaron juntos.

Hoy, del equipo brasileño que jugó en 1958, sólo quedan cinco jugadores vivos, y del equipo soviético, sólo dos.

Simonyan hizo una gran carrera futbolística. Después de 1958 jugó una temporada más con el Spartak de Moscú, donde era uno de los mejores jugadores del equipo y su mejor anotador en 1949, 1950 y 1953.

Después se convirtió en manager del equipo y en su principal entrenador. También fue entrenador del Ararat Yerevan de Armenia.

Hoy es vicepresidente de la Unión del Fútbtol de Rusia y, a pesar de su edad, sigue trabajando todos los días.

Y sobre Pelé... ya se ha dicho todo. Después de su debut mundialista en 1958 el Rey del fútbol es hoy considerado por muchos en el deporte como el futbolista más grande de todos los tiempos.

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