Lewis Carl Davidson Hamilton puso este domingo su nombre en el selecto grupo de los pilotos de Fórmula Uno más ganadores de la historia.

El británico obtuvo su cuarto campeonato de la máxima categoría del automovilismo tras finalizar el Gran Premio de México en la novena posición, pero con los puntos suficientes para coronarse en la temporada 2017.

Con cuatro trofeos, Hamilton ahora está entre los cinco pilotos más ganadores de Fórmula Uno en la historia: Michael Schumacher (7), Juan Manuel Fangio (5), Alain Prost (4) y Sebastian Vettel (4).

La carrera en el Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México tuvo como ganador al holandés Max Verstappen, mientras que el mexicano Sergio Pérez, quien buscaba estar en los primeros lugares en casa, finalizó séptimo.

La prueba fue difícil para Hamilton, pero una vez más demostró por qué es el número uno de la actualidad.

Y es que desde la primera vuelta el británico estuvo involucrado en un ligero choque con el alemán Sebastian Vettel, quien buscaba quedar en el podio de México para seguir en la pelea del campeonato.

El toque entre autos llevó a Hamilton hasta el último lugar en las primeras vueltas, pero una vez más mostró su habilidad y le sacó provecho a su auto Mercedes y remontó posiciones hasta el noveno sitio.

Vettel finalizó en la cuarta posición, lo cual entregó al británico su nuevo trofeo de Fórmula Uno.

"¡Viva México!"

Un eufórico Hamilton se entregó al público mexicano inmediatamente al bajar el auto: "¡Viva México!", dijo en español.

"Los fans de México son los mejores", dijo al presentador de la Fórmula Uno que intentaba entrevistarlo, tanto para la televisión como para los parlantes en el Hermanos Rodríguez.

El piloto abrazó a los integrantes de su equipo y se echó a correr por la pista para saludar a los fanáticos mexicanos.

El evento que convocó a decenas de miles de aficionados estuvo cargado de emotividad por las muestras de respeto que hubo para las víctimas del terremoto de septiembre pasado, el cual causó la muerte al menos 360 personas.

El público mexicano entonó su himno con un puño en el aire, una seña que usan los rescatistas cuando están buscando sobrevivientes entre los escombros.

En la vuelta 19 de la carrera, nuevamente el público levantó un puño en señal de duelo por el terremoto del 19 de septiembre pasado, el cual coincidió con otro de 1985 ocurrido ese mismo día.

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