Por qué importa: Ni la guerra ni el salto global hacia la electromovilidad están beneficiando por igual a todas las mineras. Las acciones de algunas empresas con intereses en Chile han comenzado a descontar en su valor una posible nacionalización que se debate en la Convención. Informes de bancos de inversión y cálculos privados ya comenzaron a incorporar ese riesgo en sus análisis y cuentas.

  • Aunque la estatización de la minería no ha sido aprobada por el pleno de la Convención Constitucional, por lo que aún no forma parte del texto que se plebiscitará en los próximos meses, el mercado mira con atención su desarrollo. Hay otros grandes países productores como Perú y México pensando en nacionalizar sus recursos mineros, lo que estrecharía aún más el negocio.
  • Chile es uno de los mayores productores globales de minerales; es el principal vendedor mundial de cobre y el segundo mayor de litio. Ambos elementos son clave para la transición hacia la descarbonización de la economía mundial y las energías renovables. El país, además posee amplias reservas de esos elementos.
  • Cálculos privados, sostienen que sólo en compensar a los privados, se necesitarían al menos US$ 65 mil millones bajo un cálculo conservador y para mantener esas minas, se deberían invertir al menos otros US$ 50 mil millones en 10 años.

Papeles en baja: “La nacionalización de las minas de cobre y litio del país creará un gran impacto en los recursos globales”, destacó en su último informe sobre el sector minero el banco de inversiones Barclays.

  • “Chile, hogar de algunos de los mayores productores de cobre del mundo, también ha unido firmemente su economía al metal, con las correspondientes políticas de nacionalización”, alertó el banco de inversiones australiano Tribeca Investment Partners esta semana. La firma, experta en recursos naturales, prevé una fuerte alza de las acciones mineras, debido a la creciente demanda global y la menor oferta, debido a la salida de Rusia de algunos mercados y los planes de nacionalización en Chile y otros países productores.
  • “Se mire como se mire, el sector de las materias primas nunca se vio mejor”, sostiene en todo caso Tribeca Investment Partners. Según su análisis, a pesar de que la demanda mundial de minerales sigue alta, la oferta no sube.
  • La propuesta de la Convención apunta a darle al país un año para nacionalizar las minería de cobre y litio, moción que también considera indemnizar a los privados, a través de un plan de pago basado en el valor contable de las acciones (menor que en bolsa) a pagarse en un máximo de 30 años.

Costo internalizado: “Ciertamente que el mercado considera como una posibilidad la estatización de la minería, y eso ha sido internalizado en buena medida desde que se inició el proceso de redacción, pues se asumían ciertos escenarios basados en la composición del órgano constituyente, en el tono de las discusiones políticas y más recientemente en los artículos aprobados por las comisiones y el pleno. Esto se ha reflejado más concretamente en la valorización de las compañías con exposición en Chile, sin embargo, esto se ha mezclado con fuertes movimientos en los precios de los metales y con mayores niveles de incertidumbre global”, explica Eric Medel, Analista Senior en CRU, Consultora especializada en la industria y mercados globales de metales, minería y fertilizantes.

  • Aunque ejecutivos del sector confidencian que el riesgo de que se desarrolle ese escenario parece bajo, la posibilidad de una nacionalización ha puesto en compás de análisis nuevas inversiones. Hace algunas semanas, en Toronto, accionistas de pequeñas firmas y proyectos mineros que se transan en esa bolsa estuvieron analizando el tema.
  • Los miles de millones de dólares necesarios para compensar a las mineras privadas pondrían en peligro los planes de aumentar el gasto social y reducir las desigualdades, dos objetivos detrás del proceso de cambio constitucional.

La alerta de Shearman & Sterling: “La promulgación de estas modificaciones (además la estatización del agua) también podría violar las obligaciones de Chile en virtud de los más de 50 tratados de inversión bilaterales y multilaterales de los que Chile es parte.

  • Estos incluyen Tratados de Inversión con España, Francia, los Países Bajos, Alemania, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido. Los inversores pueden presentar una demanda contra Chile en virtud de uno o más de estos Tratados de Inversión”, señala Shearman & Sterling, firma legal estadounidense que asesora a empresas y gobiernos.
  • La entidad alertó esta semana a los inversionistas a seguir con atención el proceso.
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