Sabías que cada 22 de Abril, y desde el año 1970, se celebra el día Internacional de la Madre Tierra. Ese día, 20 millones de personas participaron, saliendo a las calles a manifestarse por causas ambientales y desde ese momento quedo instaurado por la Organización de Naciones Unidas como el día de la Tierra.
Este día de la Tierra cobra cada año más relevancia y nos llama a actuar frente a la crisis climática, ¿Por qué razón? ¿Sabes quién es realmente el que sufre esta crisis? Ella… nuestra madre tierra, el planeta Tierra. Claro, eso nos repercute a todos los que la habitamos: plantas, animales, ecosistemas, microorganismos, bosques, océanos y a nosotros mismos los seres humanos.
En este día, la Tierra nos pide a gritos actuar, mientras vemos los océanos que se llenan de plásticos, o el calor extremo que estamos teniendo cada verano. Sin ir más lejos, este año tuvimos el febrero más caluroso de la historia y el segundo marzo más cálido desde que hay registros. Así, seguimos apreciando el derretimiento de nuestros glaciares, miles de hectáreas consumidas por el fuego, y la pérdida incesante de ecosistemas y especies en serio peligro de extinción.
Este año, el día de la Madre Tierra, es el segundo que se celebra dentro del Decenio de la ONU para la Restauración de los Ecosistemas. Algo tan importante como los ecosistemas que sustentan todas las formas de vida de la Tierra. Del estado de salud de ellos dependemos ¡todos! depende la salud del mismo planeta, de las especies vivas y del mismo ser humano.
Es por esto que la invitación es, y ojalá de todos los días, restaurar nuestros ecosistemas naturales. Acciones concretas pueden ayudar a combatir el cambio climático, por ejemplo, potenciar un ecosistema como el bosque... que es un gran observador de gases de efecto invernadero. Además, restaurar los ecosistemas disminuye la pobreza y previene la temida extinción masiva.