Pasadas las 4 de la tarde de este miércoles, se conoció la lectura del fallo por la demanda laboral del ex ejecutivo de Penta, Hugo Bravo, por $ 2.300 millones a los controladores del holding, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín.
Así, el Segundo Tribunal Laboral de Santiago resolvió que el grupo Penta debe pagar las cotizaciones previsionales pendientes a Hugo Bravo (que corresponden a los meses de mayo a julio de 1987), además de cuatro sueldos, tomando en cuenta $ 35,7 millones por cada mes impago, aunque no la indemización de $ 2.300 millones que pedía el ex ejecutivo.
La sentencia señala que "se condena a la demandada a pagar al demandante la remuneración mensual de $35.700.000 desde el 29 de julio de 2014 y hasta que se convalide el despido con el pago de las cotizaciones previsionales adeudadas, esto es las de AFP de los meses de mayo a julio de 1987".
La defensa de Bravo reclamaba el despido injustificado del ex gerente, por lo que demandaban esa millonaria indemnización. Sin embargo, desde el grupo señalaban que el propio Bravo firmó su finiquito. “Se demostró que mi cliente ganaba $ 35,7 millones, ellos decían que eran $17,5 millones”, declaró finalmente el abogado defensor de Bravo, Anderson Weldt.
Por su parte, la defensa de Penta aclaró que "nuestra parte solo ha sido condenada al pago de imposiciones por un período de cuatro meses. El Tribunal le dio plena validez al finiquito y ha quedado como justificado".
"No puedo dar un pronunciamiento concreto de si vamos a recurrir a la sentencia", sentenció la defensa de la empresa.