El Ministro de Energía, Máximo Pacheco, anunció hoy que se suprime en el país, el cambio de hora que habitualmente funcionaba en el invierno y verano. Cuando se implementó, en 1968, el argumento era alargar la tarde con el fin de ahorrar en consumo energético.
Para el coordinador del Centro de Energía y Desarrollo Sustentable de la Universidad Diego Portales, Claudio Huepe, “ya la evidencia es poco clara con respecto a los ahorros producto de este cambio, eso viene porque desde los años 70’, y han habido grandes cambios en los patrones de consumo en las últimas decadas”.
A lo anterior, agregó que un ejemplo práctico de esta realidad, es que “antes el beneficio era netamente de ahorro eléctrico, hoy eso no es tan claro porque la iluminación no es la energía de mayor consumo” y en este sentido precisó que “no hay un argumento muy sólido para el cambio de horario, al menos desde el punto de vista energético”.
No hay un argumento muy sólido para el cambio de horario, al menos desde el punto de vista energético
“Los patrones han cambiado mucho, actualmente los usos electrónicos en general, el uso de aire acondicionado, el microondas, el refrigerador, han aumentado mucho más que la iluminación eléctrica, entonces ya no es tan relevante el efecto del cambio de horario en términos de ahorro energético”.
El académico indicó también, que todos los estudios que se han realizado sobre los beneficios del cambio de horario en las ciudades occidentales principalmente, “muestran que los efectos hoy en día, son relativamente pequeños, porque los ejes del consumo hoy en día están en otra parte”.