"En esta tarea estaremos todos los chilenos y chilenas que queremos transformar, pero en paz, avanzar en los cambios que nuestro país requiere, pero con gobernabilidad". Con estas palabras, la candidata presidencial de Unidad Constituyente, Yasna Provoste, celebró su triunfo en la consulta ciudadana de este sábado.
La presidenta del Senadose impuso por una clara diferencia a sus competidores, la socialista Paula Narváez y el radical Carlos Maldonado. El triunfo de Provoste generará una serie de repercusiones dentro del bloque de centro izquierda, pero también en sus principales competidores en la carrera por La Moneda.
Baja participación
Una de las principales lecciones de esta jornada para Unidad Constituyente es el bajo interés por la participación.
Desde el bloque se estima que la participación será en torno a los 150 mil personas. Dicha cifra ni siquiera representa a todos los militantes del conglomerado, los que suman un poco más de 190 mil.
Unidad Constituyente no logró convocar a nuevos votantes pero tampoco logró convocar a gran parte de sus propios militantes. En parte, esto evidencia la crisis política del bloque que se manifestó en la imposibilidad de hacer primarias legales en mayo pasado.
Dura derrota socialista
Los últimos meses no han sido fáciles para el Partido Socialista. En mayo, fracasó su apuesta de aliarse con el Frente Amplio y el Partido Comunista, lo que de pasó, imposibilitó la primaria legal de Unidad Constituyente.
Aunque Narváez resistió la presión por bajarse e hizo una campaña que terminó siendo valorada transversalmente, lo cierto es que en la elección de este sábado la carta DC dobló en votación a la candidata PS.
La gran victoria de Provoste no es menor, porque en las próximas horas el bloque tiene que cerrar su negociación parlamentaria, donde la DC hará valer el liderazgo que obtuvo su candidata.
En el último tiempo, los dardos se han dirigido contra la dirigencia del PS, especialmente, tras la no inscripción de primarias. Luego de la derrota de hoy, el escenario de Álvaro Elizalde en la testera de la colectividad se sigue complejizando.
Hoy ex Presidente Ricardo Lagos, luego de votar, señaló que: “Se cometió un grave error de la dirigencia política actual por no haber tenido una primaria legal”.
Otro flanco para los socialistas es la fuga de militantes de cara a las presidenciales. Ya en la noche de este sábado, al menos, se discutía cómo evitar lo que muchos militantes temen: un fraccionamiento en el partido, con un sector que apunte a respaldar la opción de Gabriel Boric.
Una mala noticia para Sichel
Dado su pasado DC y su apuesta por construir una candidatura más alla de Chile Vamos, era evidente que el mejor escenario para el candidato oficialista era un triunfo de Narvaez o Maldonado.
Eso le hubiera permitido ir a conquistar a un electorado de centro que, si bien quiere cambios, no comulga con liderazgos más de izquierda. El triunfo de Provoste bloquea en parte esa posibilidad y deja a Sichel “orquillado” por ambos lados: por su derecha, con un José Antonio Kast que lanza este domingo su candidatura presidencial apostando al electorado de derecha tradicional, y por su izquierda con Yasna Provoste, cautivando a una parte del electorado de centro que antes podría haber votado.
El propio Sichel ha reconocido esta búsqueda por un electorado más moderado. "Siempre he sido un candidato de centro (...) yo soy una persona de centro orgullosamente. Ayer (el domingo) di las gracias a Juan José Santa Cruz, a Mariana Aylwin, porque ellos desde que yo era chico me enseñaron que ser de centro a mí no me acompleja", señaló en una entrevista después de las primarias de julio.
Boric mira de reojo
En Apruebo Dignidad habían distintos análisis sobre el impacto del resultado de la elección de este sábado, aunque lo que más primaba era la idea de que el mejor escenario para la carta presidencial del bloque de izquierda, Gabriel Boric, era un triunfo de Yasna Provoste.
Primero, porque permite contrastar de mejor forma los proyectos políticos. Pero además le permite al diputado ir a buscar votos al polo PS-PPD, los mismos que estuvieron cerca de pactar con el Frente Amplio en mayo.
El desafío para Boric, sin embargo, será congeniar dos factores: el contraste con Provoste y el perfilamiento político del diputado. Boric ha buscado acercar posiciones con la centro izquierda incluso deslizando que en segunda vuelta apoyará a cualquier candidato que impida que la derecha vuelva a estar en el poder.
Hoy, luego de la victoria de Provoste, el candidato de Apruebo Dignidad ratificó esta búsqueda en su cuenta de Twitter, haciendo un claro gesto a Unidad Constituyente: "Más allá de las diferencias no me cabe duda que nos encontraremos para construir un Chile digno distinto al de Piñera y sus ministros".