Carabineros anunció este martes que suspendió la utilización de las escopetas antidisturbios para las manifestaciones sociales que se siguen llevando a cabo hace un mes en nuestro país. La decisión se toma luego de un informe de la Universidad de Chile, y otra muestra de la misma institución, que comprueba que los perdigones utilizados no eran en mayor parte de goma, como había asegurado la ficha técnica.
El general director de Carabineros Mario Rozas comunicó la decisión en una vocería, en la que confirmó que se encomendó un informe al Laboratorito de Criminalística de Carabineros (Labocar), que muestra diferencias en la composición de los perdigones con la declarada por el proveedor, y que había sido difundida por la institución.
"Como conducta de prudencia se ha ordenado suspender el uso de esta munición no letal. Sólo podrá ser utilizada, como las armas de fuego, como una medida extrema, cuando haya un peligro inminente de muerte", explicó Rozas.
El sábado la Universidad de Chile había publicado un estudio en el que se analizaba la composición de estos perdigones, que había arrojado tan sólo un 20 por ciento era de caucho y el resto correspondía a distintos metales, entre ellos el plomo.
Hasta el lunes, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) había cifrado en 964 las personas heridas producto de disparos de perdigones, entre quienes se encuentran al menos 220 personas que han sufrido heridas oculares producto del impacto.
"Dicha restricción será evaluada una vez que tengamos en nuestro poder los resultados de los estudios complementarios que hemos solicitado en laboratorios externos de Chile y el extranjero, como también las certificaciones complementarias solicitadas al proveedor", agregó.
