Por Michelle Chapochnick
El ex director de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) durante el primer gobierno de Sebastián Piñera, Gonzalo Yuseff, se refiere por primera vez a las implicancias de la fallida Operación Huracán y a la polémica que enfrenta al Ministerio Público y a Carabineros. Y sus dardos apuntan a La Moneda: “La responsabilidad es política, es el gobierno el que tiene que conducir estas cosas y no puede tomar palco”.
Expone su visión de los hechos mientras está dedicado a la práctica privada de la abogacía, donde su foco son los asuntos penales. Muy lejanos parecen los días que, como fiscal en Viña del Mar, Quintero y Quillota solucionó el caso del “violador de Reñaca”, su rol de querellante en el fallido Caso Bombas -como máxima autoridad de la ANI- y su tupida y larga barba al estilo Fidel Castro de los 70´.
A pesar de su giro profesional, desde su estudio, hizo sugerencias en materia de inteligencia al programa de gobierno de Sebastián Piñera, de quien muchas veces se aseguró que era uno de sus “delfines”.
-En la polémica en torno a la fallida Operación Huracán, ¿a qué institución tendríamos que creerle: a Carabineros o al Ministerio Público?
-La incertidumbre, que se ha generado, hace que se pierda confianza en las distintas versiones. Puede ser tanto que las pericias del Ministerio Público hayan sido mal hechas, como pueden haber existido manipulaciones de un tercero. Pero es imposible saber qué pasó.
-A su entender, ¿los procedimientos por parte por Carabineros bordearon el límite?
-El procedimiento fue con interceptación de comunicaciones. Entonces, si es que se suplantó la comunicación no se habría actuado al límite, se habría inventado algo. Y eso es un delito. Pero hay dos versiones alternativas, no sé cuál es la real y creo que no se va a saber.
-Se ha sostenido que las supuestas pruebas conseguidas por Carabineros, a través de un Software, que les habría permitido ingresar al sistema de mensajería móvil de los investigados, fueron “manipuladas”. ¿Cuál es su percepción?
-La tecnología que se utiliza para interceptar eso es algo que desconozco y que puede cambiar de un mes a otro. Por eso, no creo que se pueda llegar a una respuesta categórica. Tampoco se va a esclarecer con (nuevas) pericias: un perito va a decir una cosa y otro lo contrario.
-¿Qué consecuencias tendrá la pérdida de credibilidad y confianza en las instituciones encargadas de realizar investigaciones?
-El problema es a futuro y con las investigaciones que vendrán. Si en algunos meses detienen a otro grupo de personas por un atentado, si el enjuiciamiento ya es complicado por el estándar de garantismo que puede existir, va a ser más difícil lograr que las investigaciones policiales terminen con personas condenadas. El tema esencial (de violencia en la zona) queda de lado en favor de una polémica que produce daño a las instituciones. Entonces, lo que parece es que se pierde la única arma que tiene un Estado de derecho para combatir la violencia política, que es detener y condenar a esas personas.
-¿Quién o quiénes son responsables de esta situación?
-La responsabilidad es política, es el gobierno el que tiene que conducir estas cosas. Y no puede tomar palco mientras esperamos muchos meses el resultado de una investigación judicial para saber si alguna de estas instituciones cometió una falsedad o una negligencia.
-¿Cómo se explica que el gobierno “tome palco”?
-Desde el principio, (el gobierno) lo ha visto como si no fuera de su competencia. Los roces entre este tipo instituciones (Carabineros y Ministerio Público) son frecuentes. Pero lo que no tiene explicación es cómo se desbordó el problema. Hay una descoordinación entre las instituciones y falta coordinación política: cómo es posible que representantes del Ministerio Público y Carabineros no se sentarán antes conversar. Cómo se llegó a que la operación más importante contra el grupo más importante, que ejerce violencia en la Novena Región, terminará en un circo.
-Recién señaló que se trataba del “grupo más importante que ejerce violencia en la Novena Región”. Es decir, ¿no tiene dudas de que son responsables de éste y otros casos?
-Pero si la CAM (Coordinadora Arauco-Malleco) se atribuye las acciones por la prensa y reivindican acciones que llaman de resistencia territorial. La duda es si son los actores materiales o sólo los voceros como ellos sostienen en los medios de comunicación. Pero, a lo menos, forman parte de una agrupación, que es importante en la generación de violencia en la zona.
-Entonces, ¿los ocho comuneros formalizados por la ahora fallida Operación Huracán tendrían responsabilidad en ese caso?
-No sé si en ese caso. Habría que preguntarle a quiénes llevan la investigación. Pero ellos son importantes dentro de ese grupo, dentro del fenómeno de la violencia. Eso puede ser una cosa que ha incidido en que los incriminen o, todo lo contrario.
-Si como Ud. asegura lo anterior es un hecho, ¿son los organismos de inteligencia los que no están haciendo bien su trabajo?
-La policía está en entredicho más por su trabajo policial que por su labor de inteligencia. Siempre hay posibilidades de cambiar el sistema. Pero parece más un problema de conducción que de las leyes en estos temas.
-Entonces, ¿cuál es la solución?
-No tiene solución. Las investigaciones futuras se pueden ver afectadas. Pero confío en la conducción política del presidente Sebastián Piñera, que va a ser diferente y más activa que la que hemos visto, y en la mano del próximo ministro del Interior.
Piñera y Villalobos
-¿Qué debería hacer Piñera en esta materia?
-En su programa hay una serie de iniciativas que están bien encaminadas, como lograr mayor coordinación a nivel de jefaturas de inteligencia, tener una fijación de objetivos a nivel nacional y diferentes organismos que los ejecuten. Sin perjuicio de las mejoras legales, se trata más bien un tema práctico. Se necesitan autoridades más competentes, más empoderadas con la visión que está empezando un nuevo ciclo y no terminando como pasa ahora.
-Sebastián Piñera ya fue presidente y los expertos señalan que no se avanzó mucho en el conflicto de la Araucanía durante su mandato. ¿Por qué ahora tendría otro resultado?
-Las soluciones no son mágicas. Estos conflictos profundos requieren de un buen enfoque de principios. En ese sentido, el gobierno de Piñera no falló. Entonces, éste planteó: aquí lo que hay es un problema de violencia política, además se trata de terrorismo y se tiene que perseguir a los responsables. En cambio, las actuales autoridades desconocen el problema, luego, lo atribuyen al robo de madera y, a continuación, dicen que había organismos que ejercían violencia política. Es ese vaivén permanente, esa falta de liderazgo político lo que se le puede cuestionar a una administración.
-Pero, como le señalé, los entendidos dicen que igual ese enfoque no solucionó mucho…
-Hay mayor sensibilidad de que el fenómeno existe, porque se le dio mayor visibilidad a organizaciones que han sido víctimas. Además, como se sabe, se condenó a estas mismas personas (investigadas ahora). A su vez, se mantuvo el número de atentados, pero la zona geográfica era más restringida, que en la actualidad. El trabajo de coordinación sí puede ayudar.
-En otra arista del caso, desde la oposición diversas figuras han criticado al gobierno por la permanencia en su cargo del general director de Carabineros, Bruno Villalobos -desde el “Paco Gate”-. Esta semana, a pesar de pedirle que suspenda sus vacaciones por la crisis de su institución y vuelva al país, no le solicitó la renuncia como muchos esperaban. ¿Cómo explica esa suerte de espaldarazo?
-Más que un espaldarazo, se tomó una decisión. No conozco la motivación, pero es una señal política.
-Es decir, ¿es una forma de respaldar el actuar de Carabineros en este caso?
-También se trata de un gobierno saliente, que no quiere hacerse problemas. O hicieron el cálculo político y decidieron dejarle la decisión al próximo gobierno. Pero quizás hay continuidad en el actuar de Bachelet, que no le ha pedido la renuncia a ningún jefe. Puede ser una forma de conducción política.
-Ud. trabajó con el general Villalobos. ¿Qué opinión tiene de él?
-Tengo buena impresión de Villalobos y de su experiencia. Si hay algo de lo que sabe, es de inteligencia. No tiene falencias en ese sentido. La experiencia práctica en materia policial es muy importante, pero otra cosa pueden ser las responsabilidades políticas. Son cosas independientes.
-Si es tan preparado en el área de inteligencia, que ha sido una de las grandes falencias en el actuar policial, ¿podría permanecer en su cargo después del 11 de marzo?
-No sé.
-¿Y Ud. no descarta sumarse al próximo gobierno?
-No.