La cadena mexicana Televisa reveló este miércoles un nuevo video con audio del escape de la cárcel del capo de las drogas Joaquín “el Chapo” Guzmán.
En las imágenes se logra apreciar cómo los guardias recién se dan cuenta de la fuga 25 minutos después, pese a fuertes sonidos de martillazos.
El Chapo habría subido el volumen a un dispositivo desde el que veía televisión, para así cubrir el sonido de los miembros de su banda, quienes con martillos hacían un hoyo bajo la ducha, determinada como el único “punto ciego” de la habitación.
Anteriormente, las autoridades de gobierno habían liberado videos de la fuga, aunque sin audio ni el detalle de los fuertes martillazos.
Hasta el momento, 34 personas han sido arrestadas por el escape del narcotraficante, incluyendo al piloto que lo habría transportado.
Así fue la fuga, según el video
El líder del cartel de Sinaloa desapareció por la ducha cerca de las 21 horas y casi media hora después, dos guardias aparecen en la grabación frente a las rejas de su celda.
"¿Guzmán?", "¿Guzmán Loera?", repiten los agentes varias veces.
Al no obtener respuesta, se empiezan a comunicar vía radio:
- Comandante, ¿me escucha?
- ¿Qué pasó?
- Hay un hoyo en la regadera.
- ¿Qué pasó?
- Hay un hoyo en la regadera, comandante, hay un hoyo en la regadera.
- ¿Hay un hoyo?
- Afirma, afirma, en la coladera de la regadera hay un hoyo.
¿De qué tamaño?
- Grande, comandante, grande.
- Oye, ¿pero el interno no está ahí?
- No, comandante, no está.
- (no se escucha)
- Lo más rápido posible porque se nos va.
Recién diez minutos más tarde, los gendarmes ingresaron a la celda.
Reacciones en México
"Las autoridades mintieron y ocultaron información, incluso ante la Comisión Bicameral (de Seguridad) se nos dio una información distinta", denunció el senador izquierdista Alejandro Encinas, al recordar cómo el gobierno había dicho que los custodios tardaron 18 minutos en llegar a la celda.
Encinas dijo que la comisión había solicitado una copia del video al gobierno pero les fue negada.
Guzmán, que ya en enero de 2001 se había escapado de otro penal de máxima seguridad, había sido detenido en febrero de 2014 y el gobierno de Peña Nieto se había negado a extraditarlo a Estados Unidos por considerar que estaba bien vigilado en México y debía cumplir su condena en el país.
En septiembre, México emitió una orden de detención con fines de extradición a Estados Unidos contra el capo, por cuya captura ofrece 3,8 millones de dólares.