Una empresaria, una dentista y una gerente administrativa oficializaron su relación en una notaría de Río de Janeiro esta semana.
La escritura que firmaron las tres mujeres las reconoce como una familia y establece una separación de bienes y da potestad a cada una de ellas para decidir sobre posibles cuestiones médicas de sus cónyuges.
Las tres mujeres especificaron en el documento su intención de que la empresaria tenga un hijo por inseminación artificial y que en su certificado de nacimiento se detallen los tres apellidos de las mujeres.
“Somos una familia. Nuestra unión es fruto del amor. Voy a quedarme embarazada y estamos preparándonos para eso, incluso financieramente”, señaló la empresaria al diario brasileño O Globlo. “Queremos disfrutar de los derechos que todo el mundo tiene, como la licencia de maternidad”.
Sin embargo, no se trata del primer caso de este tipo en Brasil. Anteriormente un trío se registró en ese país en 2012. Se trataba de una cajera, una auxiliar administrativa y un arquitecto que en Sao Paulo, la primera unión poliafectiva del país, equivalente a una pareja de hecho. Desde 2003 Brasil estableció las uniones civiles.
Pese a las críticas que este tipo de unión puedan levantar desde los sectores más conservadores, los tribunales brasileños no han creado una jurisdicción para defender o anular este tipo de uniones, por lo que los argumentos en favor y en contra dependen de la interpretación de cada caso.