El 25 de agosto Colo Colo derrotó a Universidad de Chile por la cuenta mínima en el Estadio Monumental. Partido que amplió la supremacía alba jugando de local y extendió a 18 años el invicto colocolino en un cruce que hizo noticia más por lo que pasó en las graderías que en la cancha David Arellano.
Fue en este punto por el que Carabineros emitió un detallado informe ejecutivo donde manifiestan que desde Macul no cumplieron con todos los requisitos de la Ley de Derechos y Deberes en el Fútbol Profesional.
Documento al que tuvo acceso el diario La Tercera y se consigna que "el ingreso de los barristas al lugar fue monitoreado a las 11:00, momento en el que se observó que no se utilizaron las paletas detectoras de metales". La irregularidad habría permitido el ingreso de elementos prohibidos a sectores del recinto deportivo.
El informe agrega que en el lugar hubo 28 guardias los que hicieron control de identidad a los hinchas, pero sin verificar antecedentes. Esta situación habría facilitado irregularidades como a usurpación de identidad.
Donde sí se cumplió con todo el protocolo fue en el sector de Magallanes, parte del estadio donde se ubican Los de Abajo, hinchada de la "U". Aunque también hubo reparos de lo que allí sucedió. "Una puerta lateral, que daba hacia el estacionamiento, estaba abierta, sin vigilancia y se encontraba con libre acceso", informaron desde la institución uniformada.
Falencias en el orden y fiscalización por parte de Colo-Colo, institución que no dio con el ancho que se exigen bajo el artículo 76 del decreto supremo 1.048 sobre las condiciones de ingreso y permanencia.
La conclusión de este informe señala que "quedó demostrada la falta de rigurosidad en las fiscalizaciones”, por lo que las sanciones para Blanco y Negro podrían ser serias con respecto al uso del Estadio Monumental.
